Zenit_1

El equipo de investigación en telecomunicaciones avanzadas (IRRA) había resultado un tremendo éxito con varios avances prometedores especial mente en tecnología de grado militar, todo había salido bien hasta aquel día, asociado a una tormenta geomagnética provocada por intensas emisiones solares descontrolaron los campos electromagnéticos creando enormes pulsos de energía que se extendieron a cientos de kilómetros a la redonda impactando principalmente en varias ciudades pequeñas entre ellas el poblado de zenit. 

Aún no hay una explicación razonable pero se reportaron una gran cantidad de casos de personas que declaraban que estaban en un cuerpo distinto ,  entre los pobladores se volvió común el término "intercambio de almas" o "intercambio de cuerpos". La explicación oficial dada por los analistas y psiquiatras  fue que el efecto electromagnético alteró los cerebros de diversas víctimas creando  falsos recuerdos, personalidades y  vidas. Debido a la importancia de este proyecto en materia estratégica esta paranoia colectiva tuvo que ser corregida de la manera más severa para evitar  la atención a la locación a toda costa. 

Una de las afectadas que presentó la mayor resistencia fue la señora Nancy Beltrán que decía ser un joven estudiante masculino con una edad  30 años menor  haciéndose llamar Andrés López, esta mujer presentaba grandes alteraciones psicológicas llevándola al borde de un trastorno esquizofrénico compulsivo con una alta volatilidad y agresividad, haciendo  que cualquier tratamiento tradicional fuera inútil, a su vez la mujer en cuestión rechazó totalmente a su familia especialmente a sus hijos y esposo de una manera psicótica. 

Mediante programas de rehabilitación enfocados y el uso de una intesa y forzosa terapia psiquiátrica y de reasignanción se pudo  crear una brecha a las barreras mentales que resguardaban esa personalidad "masculina"; mediante meses de hipnosis y terapia de reforzamiento conductual fue posible adecuar y corregir  la personalidad de la señora Nancy. 

Con el uso de  distintos escenarios de prueba se evaluó el  desempeño de la mujer , como su aceptación al uso y gusto de  las prendas femeninas, la aceptación general de su cuerpo como la presencia de sus senos y falta de genitales típicamente masculinos ( típica disforia de género) y los manerismos de una mujer de su edad.  No obstante la prueba más dura de todas fue la completa aceptación de su  sexualidad. Era prioridad rehabilitar y recolocar a Nancy Beltrán en su familia como si nada hubiera sucedido y eso involucraba una vida como mujer felizmente casada. Nancy demostró una enorme resiliencia al tratamiento en especial a este escenario de atracción sin embargo después de unos meses su mente finalmente se quebró liberando cualquier rastro de aquella personalidad masculina parasítica. El proceso tuvo altas y bajas con un estancamiento de varias semanas pero finalmente después de algunos meses de condicionamiento se permitió abrazar completamente su papel como una mujer con una gran atracción hacia el sexo opuesto en especial a su marido.

Actualmente Nancy es una madre ejemplar que ha eliminado su ataque psicótico y ahora espera su tercer bebé después de un duro tratamiento de rehabilitación de medio año. Su esposo y familia aunque desconcertados al inicio de su colapso mental parecen olvidar lo sucedido con Nancy al pasar de los días, su esposo especialmente remarca incluso una mejora en su relación con una mayor atracción y desinhibición sexual. Nancy por su parte dirige exitosamente un grupo de jardinería con otras madres del poblado y vive felizmente con su esposo al que espera ansiosa todas las tardes después del trabajo.